El futuro de la industria del plástico pasa por la sostenibilidad y la automatización en fabricación, y esta compañía de inyección de plásticos está marcando el cambio.
Desde hace 50 años, Moltec desarrolla soluciones innovadoras en el campo de la inyección de plásticos. Esta empresa, con sede en Esparraguera (Barcelona), ha logrado mantenerse a la vanguardia del sector gracias a su apuesta continua por la innovación, la sostenibilidad y la incorporación de tecnología punta en sus procesos productivos.
La historia de Moltec se remonta a 1969, cuando Enrique Gascó fundó la empresa bajo el nombre de Plásticos Gasco. En 1975, la compañía adoptó su actual denominación y desde entonces ha evolucionado y pasado por diferentes etapas. Hoy en día, Moltec se ha consolidado en el sector de la fabricación de piezas de plástico mediante inyección para empresas tan diversas como la automoción o los electrodomésticos.
Una de las claves del éxito de Moltec radica en su especialización en la técnica de inyección 2K, que combina en una misma pieza dos materiales plásticos o dos colores, ya sea en combinaciones blando-rígido o en combinaciones estéticas por cambio de color. “Somos pioneros en esta tecnología, que nos permite ofrecer soluciones únicas y adaptadas a las necesidades específicas de cada cliente”, explica Roberto Gava, director general de la compañía.
Pero la apuesta por la innovación no se limita a la técnica 2K. Moltec también está incursionando en el campo de la plastrónica, que implica la integración de electrónica en las piezas plásticas producidas. “Estamos trabajando en aplicaciones para el sector del automóvil, como zonas táctiles en los salpicaderos. Es una línea de desarrollo muy prometedora”, señala Gava.
Moltec reconoce los desafíos ambientales asociados a la producción de plásticos y ha puesto en marcha varias iniciativas para mitigar su huella. Entre ellas, destaca la instalación de paneles solares que generan aproximadamente el 30% de la energía consumida por la planta durante las horas de mayor insolación. Esto ha ayudado a la empresa a reducir sus emisiones de CO₂, situándose por debajo de la media europea en su sector.
Además, están explorando el uso de plásticos reciclados y materiales de origen sostenible. Aunque algunos de los sectores en los que opera, como la automoción, aún son reticentes al uso de estos materiales, la empresa busca integrarlos siempre que es posible. Gava asegura que “En los casos en los que nuestros clientes lo permiten, ofrecemos alternativas sostenibles como plásticos reciclados o de origen circular”.
La compañía también está trabajando en la mejora de sus procesos productivos para hacerlos más eficientes y reducir el consumo de energía. A través de la automatización y el control por visión artificial, Moltec busca optimizar la producción de piezas plásticas y minimizar el desperdicio de materiales “Nuestro objetivo es integrar automatismos para la manipulación de piezas en nuestras cadenas de producción, mejorando la eficiencia y la calidad”, apunta el director general.
Pero más allá de la tecnología y la innovación, en Moltec tienen claro que su mayor valor son las personas. Desde hace dos años, con la llegada de Roberto Gava a la dirección general, la empresa ha iniciado un cambio cultural que pone el foco en el capital humano. “Estamos apostando por la formación de nuestros trabajadores, por cuidarlos e invertir en ellos. Al final, eso es lo que marca la diferencia”, afirma Gava.
Con 50 años de trayectoria a sus espaldas, Moltec afronta el futuro con la mirada puesta en seguir creciendo de forma sostenible y responsable. Su compromiso con la innovación, la sostenibilidad, la tecnología y, sobre todo, con las personas, augura un prometedor porvenir para esta empresa.